El partido de baloncesto más grande que recuerde.
SOMOS GRANDES

Felicidades a los campeones, porque se lo han tenido que ganar. Nadie, desde hace mucho tiempo, les había puesto las cosas tan difíciles y, quitando las ayudas arbitrales, han hecho un partidazo, con una intensidad en ataque que no se recordaba.
Y vayamos con los árbitros. Lamentable que árbitros FIBA se salten a la torera las reglas del juego que ellos dirigen durante todo el año. Las faltas continuas y los pasos han sido una constante, no solo en este partido, sino en todo el campeonato. Es aberrante que lo que no se permite a nadie, se les permita a los americanos.
Este partido se recordará durante años.
IMPRESIONATE

Y que decir de los jugadores españoles, todos y cada uno han demostrado una casta y unas ganas que nos hacen a todos estar orgullosos de ellos. Lástima que no hayamos podido contar con Calderón en la dirección del juego, pero los que han estado han puesto todo lo que tenían.
Probablemente, esta es la medalla de la que más orgullosos deberíamos estar.
Mención especial a Wade, él solo ha roto el partido con sus tiros y es el que ha cortado de raíz la remontada española con un triple en el momento de máxima tensión para los americanos.