Si creemos que las leyes de nuestra sociedad deben contemplar estos casos o excepciones... Hagámoslo, redactémolas de forma que estos casos sean tratados con una mayor "justicia". Ante esa propuesta no tengo ninguna objeción.
No digo, ni mucho menos, que el sistema jurídico en este país no esté plagado de ciertas incongruencias, como que grabar un disco se considere legalmente más grave que pegar a un desconocido en una pelea de bar o que a estos chicos se les tenga que juzgar exactamente igual que si hubieran apaleado a un ladrón que le ha robado la cartera.
Está claro que este sistema jurídico ha de irse adaptando a los cambios que se producen en la sociedad. Todos sabemos que este proceso es lento, pero aunque sea así, no podemos permitir que la gente se salte la ley aunque esta deba ser cambiada. ¿Qué vamos a hacer? ¿una lista personal de cada uno de las leyes que hay que respetar y leyes que no hace falta porque deberíamos actualizarla? ¿Y quien señala cual debe estar en cada lista? ¿Nuestra propia conciencia?
No sería mala idea si los ciudadanos (como término generalista) tuviera una conciencia social muy desarrollada. Pero como ése no es el caso en este país, los límites entre lo que se puede hacer y lo que no, los tienen que poner las leyes. Unas leyes a las que, además, hemos llegado por consenso de nuestros representantes políticos a los que libremente hemos elegido (de acuerdo, la mayoría dan asco, pero les hemos elegido nosotros).
Si queremos que las leyes cambien, hagámoslo. Por el procedimiento correspondiente, pero hasta que se haya cambiado, hay que respetar la ley anterior, por el bien de todos. ¿no crees?
P.D. Da gusto debatir contigo.

Pongamos como término a nuestro particular debate, si te parece, las siguientes conclusiones (al menos por mi parte):
1.- Es innegable que la Ley debe ser respetada en todo caso, pero precisamente la ley deja resquicios abiertos para poder lograr, aplicando criterios que yo llamaría de moralidad supralegal, su propio incumplimiento.
En este caso personalmente creo que estaría más que justificado el intentar la aplicación de la exención de responsabilidad por medio de la famosa "enajenación mental transitoria" y dejar sin responsabilidad penal a los hijos del agresor, por cuanto que me es muy difícil reprocharles su actitud (recordemos que lo suyo no fue ir a darle una paliza premeditadamente, sino al verle huir justo tras la agresión a cuchilladas contra su madre)
2.- En cuanto a la lentitud de los cambios legales también creo que la sociedad (todos y cada uno de nosotros en nuestra propia esfera de actuación) deberíamos empezar a clamar por un cambio legislativo real, que no se quede en el mero enunciado de palabras biensonantes vacías de contenido.
Creo que estamos alcanzando, en España, una situación límite en muchas cosas, y que nosotros, las personas normales, debemos empezar a mandar a la mierda a los políticos. El primer apunte de esta "revolución pacífica" lo veo en la iniciativa de ese nuevo partido político llamado "Ciudadanos por Cataluña". Tal vez todos los demás deberíamos aprender y comenzar con una renovación política que empezase por quemar (no literalmente) los sillones de nuestros políticos-funcionarios, que empiezan a no preocuparse más que de relevarse unos a otros, sin importarles, ni tener capacidad creativa alguna, para resolver los verdaderos problemas: Los nuestros, y no los suyos.
Aires nuevos, renovación. Mandar a sus casas, a la mierda, a los políticos actuales. No seguir haciéndoles el caldo gordo a los del PSOE ni a los del PP, tan anclados en su ineficacia mental los unos como los otros.
Es hora de superar nuestra propia dependencia de los partidos políticos y de empezar a buscar nuestros propios acuerdos, nuestra propia voz, desde la sociedad, superando la ficticia lucha por el poder político que sólo favorece a los grandes bancos y a 10 o 12 familias supermillonarias.
Deberíamos superar nuestra absurda alineación: PSOE Vs. PP y empezar desde cero a exigir un verdadero cambio renovador que acabe, en primera instancia, con los "políticos de toda la vida". Me repugna observar cómo los políticos de hoy son los nietos, bisnietos, tataranietos de otros políticos que, sin importarles un pimiento quién mandaba, siempre se han enriquecido de los sueldos detraídos a los españoles.
Soñar es gratis, lo sé... (*enorme suspiro*)
Un placer haber cruzado impresiones contigo, ñ. De verdad.