Fidel Castro ha delegado, con carácter provisional, los cargos de Primer Secretario del Partido Comunista, presidente del Consejo de Estado y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas en su hermano Raúl, segundo hombre del régimen y actual ministro de Fuerzas Armadas, debido a una operación quirúrgica tras sufrir una crisis intestinal. Castro, según un comunicado leído en la televisión cubana, ha sufrido una crisis intestinal con hemorragia que le ha obligado a ser sometido a una complicada operación quirúrgica. Fidel Castro cumplirá el 13 de agosto 80 años y está al frente del Gobierno de Cuba desde 1959.
La crisis, de acuerdo con el comunicado al parecer elaborado por el propio Castro y leído por su jefe de despacho, Carlos Valenciaga, le sobrevino por el "enorme esfuerzo" realizado durante su reciente visita a Argentina para participar en la Cumbre de Mercosur y su intervención en los actos por el aniversario del asalto al cuartel Moncada tras su vuelta a La Habana. La operación, continúa el texto, "me obliga a permanecer varias semanas de reposo alejado de mis responsabilidades y cargos".
Cambios en el Gobierno
Por primera vez en la historia de la revolución cubana, Fidel Castro ha delegado con carácter provisional sus funciones como primer secretario del Partido Comunista de Cuba, presidente del Consejo de Estado y comandante en jefe en su hermano Raúl, designado el sucesor legal según la Constitución cubana. El resto de los cargos que ocupa el líder cubano han sido delegados en otros miembros del gobierno y del buró político del Partido Comunista de Cuba.
El área de Salud estará a cargo provisionalmente del ministro José Ramón Balaguer y la de Educación corresponderá a Ramón Machado Ventura y Esteban Lazo Hernández, todos ellos miembros del buró político del Partido Comunista.
El vicepresidente, Carlos Lage, se ocupará de la política energética supervisará los fondos para estos tres programas, considerados tres prioridades de la revolución, junto con Francisco Soberón, presidente del Banco de Cuba, y el canciller, Felipe Pérez Roque.
Bueno, no todos los dictadores son inmunes a la vejez.
Yo conoci uno.
