El sector del automovil esta convulso a nivel mundial
aqui el articulo completo se publico este domingo pasado
merece la pena leerlo ...............   Â
http://servicios2.elcorreodigital.com/vizcaya/pg051204/prensa/noticias/Economia_VIZ/200512/04/VIZ-ECO-234.html
En el presente, una mirada de soslayo al sector es suficiente para descubrir
que la industria del automóvil está de nuevo en crisis, pese a lo cual,
desoyendo el consejo de San Ignacio de Loyola,
se ha embarcado en un proceso de mudanza en busca de mercados emergentes
con fuerte demanda potencial y mano de obra especializada de bajo coste.
La crisis de resultados es particularmente seria en el lÃder mundial General Motors (GM),
que a finales de octubre acumulaba unas pérdidas cercanas a los 4.000 millones de dólares y en noviembre anunciaba la supresión de 30.000 empleos y el cierre de varias plantas,
al tiempo que reconocÃa haber «inflado erróneamente» sus resultados en varios ocasiones. Pero tampoco es nada halagüeña la situación de Ford, DaimlerChrysler y Volkswagen (VW). Estas firmas también pertenecen al grupo de los 'cinco grandes' fabricantes y están igualmente inmersas en procesos de despidos masivos, reducciones de capacidad productiva, negociaciones para el endurecimiento de las condiciones laborales de sus empleados -en el caso de Ford, también de sus pensionistas- y caÃdas importantes en la cotización de sus acciones.
Sólo la japonesa Toyota, la quinta en discordia, está triunfando en todos los mercados y goza de tan buena salud -gana más dinero que los otros cuatro juntos y ha escalado hasta el segundo lugar en unidades producidas, con 6,8 millones en 2004- que se ha propuesto desbancar a GM como primer fabricante antes de que acabe la década. Intención que no deberÃa sorprender a nadie si se tiene en cuenta que, además de haber enseñado a todos sus colegas a fabricar automóviles en la modalidad 'just in time', es el principal abanderado de los llamados vehÃculos 'hÃbridos', resultado de aplicar una tecnologÃa que combina un motor convencional de gasolina con otro eléctrico: la segunda versión del Prius, el coche hÃbrido de Toyota, se ha saldado con cerca de 200.000 unidades vendidas este año y se espera llegar al millón de unidades en 2010.
Asà pues, en la situación actual de la industria automovilÃstica coinciden una coyuntura débil con el éxodo de largo alcance que las grandes multinacionales del sector y sus principales suministradores de la industria auxiliar han iniciado hacia paÃses de bajos costes, larga jornada laboral -en Polonia, Chequia y Eslovaquia se trabajan unas 2000 horas/año, frente a las 1.440 de Francia y Alemania-, sindicatos amables y fiscalidad complaciente.
Es, además, una industria muy exportadora; la cuarta del mundo tras Japón, Alemania y Francia. En los últimos tiempos, el sector viene atravesando una situación delicada. Pese a que el mercado interior continúa registrando récords de matriculaciones -a finales de 2005 se espera superar los 1,5 millones de unidades-, la caÃda de la demanda en los principales paÃses compradores de automóviles fabricados en España -Alemania, Francia, Reino Unido e Italia- ha provocado un descenso cercano al 10% de las ventas exteriores, una circunstancia preocupante para un paÃs que exporta el 80% de su producción automovilÃstica. Un estudio reciente de la consultora PwC estima que la producción de automóviles en España caerá un 11,5% en los próximos cinco años, con lo que la industria nacional fabricará en 2009 un total de 2,6 millones de vehÃculos, 340.000 unidades menos que en 2004. Otras previsiones (Faconauto) apuntan a una reducción de 650.000 vehÃculos. Además, el sector sufre ya las consecuencias de la pérdida de competitividad exterior española, asà como del desvÃo de las inversiones hacia el Este y el consiguiente traslado de la fabricación de algunos modelos (Ka, Meriva,...) a esos paÃses: propuestas de negociación de jornada y salario reducidos, expedientes de regulación de empleo, etcétera; decisiones empresariales que se adoptan siempre fuera de España, en las sedes centrales de la multinacionales del sector.
La emigración de inversiones está siendo acompañada por los principales proveedores españoles de estas multinacionales, que disponen de tamaño y recursos para hacerlo, dado que no pueden permitirse perder su cuota de mercado con los grandes fabricantes sin poner en peligro su existencia. El problema se hará gigantesco para los pequeños proveedores que no disponen de medios financieros y humanos bastantes para seguir el rastro de sus clientes de pies ligeros ('foot-loose'). Ésos perderán sus opciones si no emprenden una estrategia de colaboración entre ellos, que en muchos casos deberá llegar hasta la fusión.