INCENDIO-RASCACIELOS
El incendio en el edificio Windsor llega a las plantas bajas y aún está sin controlar
Madrid, 13 feb (EFE).- El incendio en el edificio Windsor, el octavo rascacielos más alto de Madrid con 106 metros, 31 plantas y situado en el corazón financiero de la capital, se encuentra ya en las plantas bajas, al alcance de los servicios de extinción de los bomberos, aunque todavÃa no está controlado.
El fuego se consume a un ritmo más lento y está al alcance de las autobombas, lo que permite combatir las llamas de una forma más efectiva, explicó a Efe el delegado del Gobierno, Constantino Méndez, quien apuntó que la hipótesis con más fuerza sobre el origen del siniestro sigue siendo un cortocircuito en la planta 21.
El incendio, que se inició a las 23.20 horas y que no ha provocado vÃctimas -tan sólo tres bomberos resultaron afectados por inhalación de humos-, es el más importante que ha sufrido la ciudad de Madrid, y todavÃa no está controlado, según declaró a primera hora de la mañana el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón.
A estas horas, decenas de personas, entre ellos vecinos de la zona, observan y fotografÃan la torre ardiendo, después de una noche en la que numerosos jóvenes procedentes de los locales nocturnos cercanos fueron los testigos más numerosos del siniestro.
Tras más de nueve horas, y con tres derrumbes parciales, los bomberos arrojan agua también por las cuatro caras del edificio y humedecen los edificios colindantes, pues, de producirse el colapso, afectarÃa a cuatro inmuebles circundantes, entre ellos el del BBVA y el de Seguros la Estrella.
El delegado del Gobierno explicó que se produjeron dos momentos crÃticos con el fuego en el piso 17, en el que aguantó la estructura interna, aunque no la perimetral.
Del piso 17 para hacia abajo, el edificio se ha mantenido mejor, con menos desprendimientos de la cubierta, lo que ha evitado la extensión del fuego a los grandes almacenes anexos, señaló.
En esta lÃnea, uno de los arquitectos que perteneció a la Junta de Compensación de Azca y colaborador de uno de los diseñadores de la torre (Genaro Alas), calculó que en el momento crÃtico se llegó a registrar una temperatura de más de 800 grados centÃgrados.
El estacionamiento subterráneo está controlado, y se ha avisado, mediante 15.500 llamadas, a los vecinos para advertirles de la necesidad de mantener la puertas y ventanas de sus domicilios cerradas.
Nadie pudo explicar la forma en que el incendio pudo prosperar sin que funcionaran los mecanismos de extinción en una fase temprana del siniestro.
Las lÃneas de metro que pasan por la estación de Nuevos Ministerios (6, 8 y 10) han sido interrumpidas, asà como el tráfico ferroviario entre las estaciones de ChamartÃn y Atocha. Ambos servicios tienen estación subterránea bajo la zona en que tiene lugar el incendio.
Las calles aledañas al edificio Windsor, como Orense, Castellana o Raimundo Fernández Villaverde, permanecen cortadas y acordonadas desde la media noche.
En la extinción, han participado en torno a 150 bomberos, todos los efectivos disponibles en la capital, y además, el SAMUR ha desplazado entre 80 y 90 especialistas, distribuidos entre tres hospitales de campaña.
La eléctrica Unión Fenosa, la suministradora de energÃa en la zona, también trasladó una dotación técnica, mientras que el suministro de agua fue controlado y mantenido con fluidez por el Canal de Isabel II; Gas Natural ha cerrado desde primeras horas de la madrugada su red principal en un radio de 200 metros en torno a la torre.
Poco después de comenzado el incendio se personaron en la zona Ruiz Gallardón; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; el ministro del Interior, José Antonio Alonso, y la ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, asà como otros responsables municipales y de la administración autonómica.
El presidente del Gobierno, Jose Luis RodrÃguez Zapatero, y la vicepresidenta, MarÃa Teresa Fernández de la Vega fueron informados por el delegado del Gobierno de la evolución del siniestro.
La ministra de Fomento, Magdalena Alvarez, manifestó a EFE que "se está trabajando de forma coordinada para lograr en la medida de lo posible, y tratar de conseguir, que el incendio tenga los menos efectos posibles y no pase a los edificios colindantes. Creo que eso parece estar asegurado y no va a haber mayores problemas".
El edificio Windsor, del que la auditora Deloitte ocupaba 20 plantas y la firma Garrigues otras dos, estaba a punto de concluir unas obras, con las que se ha remodelado la fachada y se habÃa instalado una nueva escalera de emergencia.
PD de quién fué el despiste?, debiera estar más kontrolado el tema de la seguridad en las obrasÂ
