Jorge58 (sin comentarios)
|
 |
« Respuesta #65 : 11 de Septiembre 2007, 13:42:14 » |
|
(del diario Olé)
La semana pasada, minutos después de ganarle a Carlos Moyá, el serbio Novak Djokovic llegó, a su manera, al Teatro Colón. Después de tantas imitaciones de vestuario, en canchas de entrenamiento, lo hizo con una multitud de público, más de 20.000 personas en pleno Arthur Ashe. El finalista del US Open sacó perfectamente los tics de Maria Sharapova y Rafael Nadal.
En la era del marketing, el finalista del US Open compone a un nuevo personaje: si Roger Federer es la frialdad, lo sobrio y clásico, el fino talento, y Rafael Nadal la fuerza, determinación, la garra desprolija, Nole es el bromista, el hombre que ríe. Por eso le pusieron "The Djoker" (The Joker es tanto "el bromista" como El Guasón). Anteayer, habiendo perdido varias oportunidades de ganarle un set a Federer, dijo: "Mi nuevo libro se va a llamar: ''Siete set points''".
Roddick, Nadal, Hewitt, Sharapova, Federer, Sampras... todas sus caracterizaciones pueden encontrarse en el sitio Youtube. Salió en la tele y hasta hizo un minishow para Segundosaque.com, la web de Martín Vassallo Argüello. El serbio explicó el nacimiento de esta faceta: "A los diez años imitaba los movimientos de Sampras porque quería jugar como él. De Agassi quería tener la devolución; de Edberg, la volea".
Las imitaciones, antes, eran para amigos. "No lo hacía en público. Me habrían mirado y dicho: ''¿Quién es este idiota?''". Federer dijo no haber visto la imitación suya, pero reveló: "A algunos no les cayó bien, a otro sí". Djokovic dijo que "todos se lo tomaron a broma". Incluso Sharapova, quien hinchó por él sentada cerca de los padres del serbio. "Somos amigos, me encantó que viniera a verme", dijo Novak, y reveló que Roddick y el checo Radek Stepanek son los que mejor lo imitan a él. "Hacen picar muchas veces la pelota, abren la boca igual que yo...". En el US Open, le contaron más de 25 piques en el saque.
"Los jugadores del pasado son, definitivamente, los más graciosos para ver", opina Djokovic. Teniendo en cuenta su amistad con Robert de Niro, quien lo invitó al restaurante japonés que posee en Manhattan y se sentó, como Sharapova, en el palco de los serbios, no sería raro esta imagen en el futuro: peli que se estrena y Djokovic haciendo un papelito de mozo, de mafioso, de ladrón...
|