Partiendo de la base que tu afirmabas que:
Raúl e cirticado en el madrid y es criticiado por la mayoría de meregues!!! sino mira encuestas....
ahora resulta que la unica opinion imparcial es la de aficionados que no sean del madrid, que seguramtne habran visto en los ultimos dos años poco mas que los resumenes de los partidos del madrid menos el que les tocase contra su equipo.
En fin...
Aqui os dejo la opinion de alguien que se expresa mejor que yo...
La medida cruel del gol
Juan F. Cía
A los delanteros de todo el mundo se les mide con la misma vara: el gol. Raúl González, capitán y buque insignia del Real Madrid, delantero de profesión, lleva 327 días sin hacer gol con la camiseta blanca en partido oficial. Preguntas hay muchas, respuestas muy pocas. En el fútbol moderno, el gol se ha convertido en el resultado lógico del éxito y en una montaña rusa para los delanteros.
El último gol del delantero madridita se produjo el 26 de octubre de 2005 contra el Deportivo de la Coruña en el estadio de Riazor, con un disparo parabólico desde fuera del área. Desde esa fecha, Raúl lleva 24 partidos con la camiseta blanca y en ninguno de ellos ha perforado la puerta contraria. El debate periodístico está abierto y los aficionados se preguntan por qué no marca el capitán blanco.
El punta está sometido a la crueldad implacable de las estadísticas. Tantos partidos jugados, tantos goles transformados. Raúl, pese a su experiencia y trayectoria, sigue sometido a la misma regla cruel. ¿Son 327 días sin marcar en partido oficial un exceso para el '7' blanco? Tal vez sí, pero las razones pueden justificar el resultado estadístico.
El Real Madrid ha jugado tradicionalmente con sistemas de juego con dos delanteros. Pese a las posibles variaciones tácticas y alguna excepción, los dos puntas se han mantenido invariables en los últimos tiempos. Jorge Valdano, Fabio Capello (en sus dos etapas), Guus Hiddink, Jupp Heynckes, Vicente del Bosque, Carlos Queiroz, José Antonio Camacho, Vanderlei Luxemburgo...todos ellos apostaron por dos delanteros, aunque los sistemas tuvieran variaciones tácticas entre sí.
La mayoría de estos entrenadores apostaron por la continuidad de Raúl en el equipo titular. Jorge Valdano lo hizo debutar, Fabio Capello lo escoró a la banda izquierda en su primera etapa, Vicente del Bosque lo mantuvo arriba con diferentes parejas de baile, José Antonio Camacho creyó en él mientras estuvo en el cargo, Carlos Queiroz lo mantuvo arriba junto a Ronaldo...
Las estadísticas no mienten: Raúl ha perdido capacidad goleadora en las últimas tres temporadas, a partir de la campaña 2003-2004 (2003-2004: 46 partidos y 13 goles; 2004-2005: 43 encuentros y 13 goles; 2005-2006: 35 partidos y 7 goles). Además, en la campaña 2002-2003 (45 encuentros y 25 goles) tuvo mejores números que la temporada anterior (53 partidos y 26 goles).
Los medios de comunicación señalan que la pérdida de capacidad goleadora de Raúl se debe a su falta de presencia en el juego de área. La llegada de Ronaldo (temporada 2002-2003) habría afectado al juego del capitán. Pero los números no confirman con excesiva fuerza esa afirmación. Posiblemente, la temporada 2002-2003 haya sido una de las tres mejores temporadas del delantero con los números en la mano, superada por la campaña 2000-2001 (48 partidos y 36 goles) y la 1998-1999 (47 encuentros y 28 goles).
Al margen del yugo de las estadísticas, el juego de Raúl se ha alejado del área. Pero...¿cuáles son las verdaderas razones de ese cambio? La presencia de Ronaldo ha monopolizado en ocasiones el juego del equipo, pero en otros momentos Raúl no ha tenido la confianza ni la velocidad suficientes para desarrollar su juego inteligente dentro del área.
Sin embargo, el '7' blanco se mantiene dentro del campo partido tras partido. Independientemente de su rendimiento numérico, los entrenadores confían en el delantero madridista. La razón es evidente: Raúl ha cambiado goles por movimiento en el campo y presión al rival. El punta es el primer defensa del Real Madrid, se mueve al espacio y busca salir de la presión para recibir solo e iniciar el juego.
No son goles, pero es fútbol.