Galindo se sale con la suya
Cruz Azul está indignado y hará valer sus derechos ante la Federación Mexicana de Futbol para que interceda la FIFA
Daniel Blumrosen Juárez
El Universal
Martes 18 de julio de 2006
Aarón Galindo y el Hércules cumplieron su promesa: no se detuvieron ante nada.
A pesar de que la directiva del Cruz Azul manifestó su inconformidad por la contratación del defensa central con el equipo de la Segunda División española, ésta se hizo oficial ayer, aunque eso no quiere decir que la disputa entre ambos clubes haya terminado.
Guillermo Álvarez, presidente de La Máquina, asegura que Galindo "estaba comprometido con el equipo" y advierte que harán valer eso en la Federación Mexicana de Futbol, la cual podría interceder ante la FIFA.
La molestia celeste se debe a que, al parecer, ya se tenía un arreglo con el zaguero para que renovara contrato con el equipo tan pronto recibiera la carta que lo habilitaba para jugar profesionalmente después de cumplir con el año de suspensión que purgó por dar positivo en un control antidopaje.
Sin embargo, desde hace seis meses, Aarón firmó un acuerdo con el Hércules, el cual entró en vigor justo cuando su contrato con el Cruz Azul finalizó (30 de junio).
Si bien es cierto que el capitalino continuó entrenando con el primer equipo celeste, jamás percibió el sueldo que tenía pactado, pues la cúpula cruzazulina decidió no dárselo -al igual que a Salvador Carmona- debido a que estaba inhabilitado para jugar.
Es por eso que decidió marcharse cuando los primeros rayos de la libertad lo alumbraron.
Pero no lo hizo sin antes asesorarse debidamente.
Los estatutos que actualmente rigen al futbol mundial le permiten a cualquier jugador que no tenga vínculo con algún equipo contratarse con el que desee y, en el caso de Aarón, ése es el Hércules.
Eso explica que la directiva del club de Alicante asegure que no existió alguna anomalía en la contratación del defensa central.
Además, Galindo cuenta con 24 años de edad, por lo que los Cementeros tampoco pueden reclamar la cantidad correspondiente a sus derechos de formación, ya que la FIFA estipula que eso sólo se puede hacer en los jugadores menores de 23.
En cuanto al traspaso, Aarón tiene derecho a recibir un porcentaje de la operación realizada entre los dos equipos, pero se negó a recibirlo con tal de que lo dejaran emigrar.
No obstante, tuvo que esperar algunos días antes de viajar a España, pues primero debía cumplir su sanción (4 de julio) y después ser notificado oficialmente de que ya podía regresar a las canchas.
Ya con el documento en su poder y la tranquilidad de que su antiguo club no podría obligarlo a regresar a México -al menos no durante los dos años que tiene firmados con el Hércules-, Galindo comenzó la etapa final de su vinculación con el club español.
Ahora, todo parece indicar que La Máquina tendrá que conformarse con el dinero que recibirá por el traspaso del jugador y una cláusula que lo obligaría a regresar al Cruz Azul antes de militar en otro club mexicano.
Desde hace seis meses, Galindo y su nuevo club se propusieron formalizar la relación tan pronto el zaguero abandonara la prisión en la que estaba, lo cual sabía el Cruz Azul, pero no hizo nada para detenerlo hasta que ya era demasiado tarde.