Y tú, dices: Con los datos reunidos hasta ahora: te quiero tal cual te conozco de momento.
Y yo, sueño:
Penumbra en los tejados retenida;
La noche es un desvan enorme,
sigilo que arde en astros prematuros.
Fuentes, calles enteras, charcos
para mi escarcha sucesiva...
desvelo a ciencia cierta.
Un extravio continuo,
sólo un destierro puedo prometer:
desmemoria infinita,
pues ya nada me distingue
esta noche, de los sueños.
Si quisiera volver a nacer, lo tendría muy dificil para elegirme un nuevo yo, pero seguro elegiría tu poesía para vestirmela por dentro, es hermosa y delicada y me da mucha paz leerla.
gracias mi ninia de los mares shiquitos
