Fuente: Jeniffer Vega (Viernes 11 de noviembre de 2005)
Diario Las Ultimas Noticias (Chile)
Las denominadas "Drag King" se disfrazan de hombre para protestar contra las normas establecidas. Atrevidas mujeres se cortan mechones para transformarlos en bigotes y barbas, ocupan gasas para aplastar sus curvas y con mucha imaginación crean bien dotados miembros viriles. Son las denominadas "Drag King", un grupo de féminas que juegan a ser hombres con el único fin de parodiar la rudeza del sexo fuerte y rechazar los roles impuestos.
Estas chicas sueñan con caminar libremente por las calles con el pelo engominado, terno y corbata, pero en el diario vivir no abandonan su faceta femenina.
"A través de nuestras performances buscamos evidenciar que lo masculino y lo femenino son construcciones sociales históricas", sentencia enérgica Anatolia, la profesora del insólito taller que impartirá a futuras "Drag King", la incipiente tendencia que conquista a mujeres de todas las edades.
Cobijadas en el Movimiento Unificado de Minorías Sexuales (MUMS), el curso teórico y práctico ya tiene fecha: 3 de diciembre.
-¿Estamos hablando de un nuevo sexo?
-No, con los talleres buscamos una descategorización sexual que socave la idea de que la heterosexualidad es lo normal. Simplemente estamos hablando de que el género tiene una combinación más amplia que hombre y mujer.
-Entonces, ¿buscan que las mujeres se hagan hombres?
-Hacemos que transiten por todas las experiencias eróticas y combinaciones de género. En este caso, cada una cuenta su experiencia con el mundo masculino y buscamos referentes universales.
-O sea, vamos a empezar a ver mujeres galanes.
-En el curso nos fijamos en los elementos distintivos como son el cigarro y el copete. También en que los hombres hablan fuerte, ríen poco y caminan más rápido. Y así vamos construyendo nuestro personaje.
-Cuando protestan en la calle disfrazadas de machos ¿qué dice la gente al verlas con tanto pelo postizo en la cara?
-Se sorprende, vemos un tremendo signo de interrogación en sus caras, pero no ha pasado nada malo hasta el momento. Lo más heavy fue cuando visitamos una disco gay para finalizar uno de los talleres y ahí nos discriminaron.
-¿Alguna de las alumnas fue aventajada y adoptó su lado varonil para siempre?
-No. Ninguna de ellas ha llevado su papel a la vida diaria, algunas han creado performances o shows para divertirse, pero la mayoría nos disfrazamos solamente para protestar.
-A usted no me la imagino de hombre, ¿toma algún rol en especial?
-Ah, me disfrazo de un hombre trabajador, de clase media llamado Juan. A otras chicas les gusta meterse en el papel de los hip hoperos o caballeros muy refinados, pero la gracia de las "Drag King" es construirle una historia creíble a su varón.
