La oscuridad abriga
nuestras palabras,
bajo el sonido de los grillos
y las canciones de ojos cerrados
a las que le robamos las frases finales.
Construímos pensamientos
de yerba bajo nuestros pies
y lluvia sobre nuestros hombros.
Enredamos dedos en los rizos
y besos en las manos,
bebemos miradas felices, y,
regalamos abrazos a la Luna.
14/7/05
Hoy soy un día de otoño en tu tierra