No me he enterado que es lo que ha pasado, ni que se ha dicho en otros post ni como han estado de caliente los ánimos.
Es raro que yo conteste a un post que trata de política, y no es porque no los lea, que lo hago detenidamente, sino porque no tengo mucho que aportar a lo que poneis los asiduos a la sección (que todos sabéis quienes sois) y porque, lo reconozco, no es uno de mis temas preferidos de conversación. Normalmente tengo la sensación de que las discusiones (que no peleas) que se llevan a cabo se hacen desde una postura bastante correcta y educada. Rara vez se leen descalificaciones personales o como se dice por aquí "salidas de pata de banco" por lo que tengo que felicitaros por ello. Pero como dice PeterPaul, sería mucho mejor que el "rara vez" se convirtiera en "nunca".
Conseguís que sea capaz de ver diferentes puntos de vista sobre un tema (y no tener que escuchar a políticos que solo se atacan unos a otros por joder, y no para aportar mejoras a las propuestas de los demás) y no podéis imaginaros lo que os lo agradezco.
Me gustaría pediros a TODOS que sigais expresando vuestras ideas, que sigais debatiendo y defendiendo vuestras creencias. Que, por lo menos yo, aprendo mucho de vosotros (tanto cuando comparto una idea como cuando no estoy de acuerdo) y también me ayuda a enterarme de temas que desconozco y de los que carezco de opinión por ello.
Gracias a todos
Karma por esas palabras, ñ... Aunque como tú yo tampoco sé muy bien qué ha pasado...
Ahora lo siento, pero os voy a soltar un tostón...
Peter apela, sin duda con toda la buena intención del mundo, al silencio, para evitar las discrepancias...
Yo prefiero seguir discutiendo. Prefiero incluso la enemistad sobre la amistad excesivamente manifiesta.
¿Qué se oculta con el silencio? La verdadera enemistad. Y la frialdad y la lucidez de su naturaleza no son de temer sino allí donde puede hacer daño y traicionar con agresividad: Oculta en el silencio.
Pongamos que existiera en el foro alguien que se presenta abiertamente como un enemigo para ocultar su amistad. Alguien que da muestras de su hostilidad para no hacer daño con su maldad. ¿Y por qué hace todo eso?
Por amistad hacia los hombres, por sociabilidad filantrópica.
Su fingimiento consiste en pasar de lo caliente a lo frío; en la diferencia entre la cólera exaltada y la lucidez glacial, en fingir ser precisamente lo que es: Enemigo, pero por ser amigo.
Iré un poco más allá:
¿Y si una nueva sabiduría política se dejase inspirar mañana por la sabiduría de esa mentira, por esa manera de saber callar, mentir, disimular o pervertir la lucidez malvada? ¿Y si se exigiese que se sepan, y se sepan disimular en la práctica, los principios o las fuerzas de desunión social, todas las disyunciones amenazadoras? ¿Y si alguien consiguiera disimularlas para, así, preservar el lazo social?
Sería ésta entonces una nueva sabiduría política humana, humanista, antropológica. Sí, desde luego...
¿O tal vez sería una nueva sabiduría política pesimista, escéptica, desesperada, incrédula?
¿Sería una nueva virtud, entonces? ¿O la perversión definitiva del Ser Humano?
Puede tal vez defenderse como razonable el afirmar que entre amigos más vale guardar silencio para guardar lo que queda de amistad, pues pocos amigos seguirían siéndolo si oyeran lo que de ellos se dice en la intimidad. Y como los amigos saben esta verdad de la verdad, más vale que guarden silencio juntos.
¿Seguro?
¿No es este un acuerdo tácito mediante el que los separados están juntos sin cesar de ser lo que están destinados a ser; y por extraño que parezca, lo son entonces más que nunca: Disociados, aislados, separados. Seres solitarios?
Los amigos que callan son solitarios, pero se alían en silencio sobre la necesidad de callarse juntos, cada uno por su lado. Lazo social, quizá, pero en la común afirmación de la desconexión, en el estar-solo intempestivo y simultáneo, en la aquiescencia conjunta de la desunión.
¿Para qué estar juntos entonces? ¿Para dar testimonio del secreto, de la separación, de la singularidad, de la mentira?
Allá cada cual...
Jenofonte nos enseñó: “Es propio de hombres sabios sacar provecho de sus enemigos”
Y creo que fue Ralph Emerson quien dijo: “Todos los hombres que conozco son superiores a mí en algún sentido. En ese sentido aprendo de ellos.”
Seguid discutiendo. Eso nos hace mejores.
