Y abrí el balcón,
desde el que se asoma mi alma.
Escuché el grito de amistad fraterna.
Y tu susurro viajaba en el tiempo.
Lo percibí en el aire, me refrescó.
No dudé: me impregné de él.
Sangraron las yemas de nuestros dedos,
y mezclamos nuestra sangre.
Juramento de amistad.
Sello de armonía.
Instantes, Minutos...¡¡¡ Vida !!!
La fuerza del cariño..
Y siempre fuimos amigos.
Juntos, a lo largo del sendero
que conduce a la eternidad.
Brindo por la amistad.....
