Tus hijos no son tus hijos,
son hijos e hijas de la vida
deseosa de si misma.
No vienen de ti, sino a traves de ti
y, aunque estén contigo
no te pertenecen.
Puedes abrigar sus cuerpos
pero no sus almas,porque ellos
viven en la casa del mañana.
Que no puedes visitar
ni siquiera en sueños.
Puedes esforzarte en ser como ellos,
pero no procures hacerlos
semejantes a ti.
Tu eres el arco del cual tus hijos
como flechas vivas son lanzados.
Deja que la inclinacion
de tu mano de arquero
sea para la felicidad.
Kahil Gibran.
Gracias papa y gracias mama por colgar este poema en mi pared el dia que naci.
