... Y Dios dijo: - Baja por aquel valle.
Y Adán preguntó: -¿Qué es un valle, señor?
Y Dios se lo explicó. Y después le dijo: - Adán, atraviesa el río.
Y Adán preguntó: -¿Qué es un río, señor?
Y Dios se lo explicó. Después le dijo: - Adán, sube aquella montaña.
Y Adán preguntó: -¿Qué es una montaña, señor?
Y Dios se lo explicó. Más tarde le dijo: -Al otro lado de las montañas encontrarás una caverna.
Y Adán preguntó: -¿Qué es una caverna, señor?
Dios se lo explicó. Y entonces le dijo: - En la caverna encontrarás una mujer.
Adán preguntó: -¿Qué es una mujer, señor?
Dios se lo explicó y dijo: - Quiero que te reproduzcas.
Adán preguntó: -¿Cómo hago eso, señor?
Y una vez más Dios se lo explicó...
Y allá se fué Adán. Descendió el valle, cruzó el río, subió la montaña, entró en la caverna, encontró a la mujer... y al cabo de cinco minutos estaba de regreso.
Dios, algo irritado ya, preguntó: -¿Y ahora qué pasa?
Y Adán preguntó. -SEÑOR, ¿QUÉ ES UNA JAQUECA?
