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amapola
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« : 17 de Noviembre 2008, 16:57:50 » |
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UNA LEYENDA ASEGURA QUE SE TRATA DE LAS LAGRIMAS DE UN GIGANTE
A primera vista resultan tan perfectas que parecen modeladas por la mano el hombre, pero nada mas lejos de la realidad. La madre naturaleza a veces tiene unas ocurrencias de lo mas curiosas... como en el caso de las Colinas de Chocolate de Filipinas.
Y es que los que ven por primera vez las colinas de la isla Bohol, en Filipinas, suelen pensar que son una construcción monumental hecha por el hombre. Sin embargo, son completamente naturales. Las colinas parecen bombones en forma de conos de chocolate, sobre todo en invierno, cuando los pastizales que las cubren quedan completamente secos, dándole su tono marrón.
Situados en la isla de Bohol, en Filipinas, los conos son una formación geológica única: suman alrededor de 1268 colinas en forma de cono casi perfectas y lo más llamativo, de aproximadamente el mismo tamaño, repartidas en una superficie de más de 50 kilómetros cuadrados, salpicando el paisaje de forma uniforme. La mayoria de ellos alcanza los 120 metros de altura.
Las Colinas de Chocolate son un verdadero atractivo turistico en Filipinas, una zona muy pintoresca y de gran atractivo visual. Ademas de los conos de chocolate, la zona esta salpicada de campos de arroz y pequeñas viviendas construidas con bambu.
Durante la estacion seca, la hierba que cubre los conos se seca y las colinas se convierten en verdaderos bombones de chocolaate, que hacen honor al nombre por el que son conocidas "Chocolate Hills" (en ingles).
No hay una teoria consolidada sobre el origen de los conos, aunque se cree que alguna vez fueron depositos de piedra caliza bajo el mar, levantados por el movimiento de las placas. El viento y la erosion del agua de lluvia acabaron de modelarlas con la forma que actualmente conocemos.
Pero hay otra version mucho mas romantica sobre el origen de los conos de Filipinas, que proviene de una antigua leyenda del lugar: los conos serian las lagrimas secas de un gigante inmortal llamado Arogo, que lloro por la muerte de su amada.
Lo cierto es que, ya sea de una forma u otra, los conos de chocolate son un paisaje incomparable, elegidos por el gobierno filipino para la promocion turistica del pais.
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