Y es que Publicitar la marca IKEA superando los limites conceptuales de la casa para pasar a la calle y a los medios públicos, donde la gente normal pasa gran parte del día, es una táctica genial que tiene efectos positivos tanto en la imagen de la empresa como en los ciudadanos que pueden disfrutar, aunque solo por periodos limitados, de espacios públicos más cómodos y acogedores.