El otro día... Mientras tomaba un descanso en la oficina donde trabajo, sin querer escuché a la secretaria, que estaba dando consejos a su hija adolescente:
- Debes fijarte muy bien a la hora de escoger marido –le dijo con voz tranquila- Fíjate en tu padre: sabe arreglar coches, lavadoras y cualquier aparato eléctrico.
Pensé que era un digno elogio para su esposo, hasta que agregó:
- No se te ocurra casarte con un hombre así… porque nunca vas a tener nada nuevo, joía...
