Anoche conocí a una señora madura en la disco. Tenía buen aspecto para una mujer de 57 años. De hecho, no estaba nada mal, al punto que me encontré fantaseando que quizás tendría una hija guerrera que seguramente sería guapísima.
Tomamos unas copas, nos hicimos algunas caricias más, y me preguntó si nunca había tenido un 'Doble Deportivo'.
-¿Qué es eso?, le pregunté.
-'Es un trío sexual con madre e hija,' me contestó.
Le dije 'No!', muy excitado. ¡Mis sueños se cumplían! ¡¡¡Era mi día!!!
Tomamos algunas copas más, y me confirmó que hoy era 'mi noche de suerte' y nos fuimos para su piso.
Encendió la luz del vestíbulo y gritó:
-'Mamá, ¿todavía estas despierta, cariño?'
