Esto es una tia que va a confesarse y le dice al cura:
- Padre, he pecado.
- Si hija mia!
- Padre, he hecho el amor en la Iglesia.
- ¿Y eso, hija mia?
- Pues vera, la ocasión...
- ¿Pero, donde lo hiciste en la Iglesia?
- Verá Padre. ¿Sabe usted donde esta San Pedro, no?
- Si, hija mia.
- Pues allí, detras del santo, hay una puertecita, que da a un pasillo que va a dar a una especie de cueva muy oscurita, y... bueno, pues allí.
- Ah, ya se hija mia!!. Desde luego, el pecado es grave, pero el sitio es cojonudo, ¿verdad?
