Esta noche soñé,
que mi cuerpo era un desierto de arenas doradas y ardientes;
y allí, formando parte de mi piel, estabas tu.
Tu, oasis de grandes palmeras,
acariciándome como manos de amante.
Tu, manantial de aguas cristalinas
sofocando mi calor y tornándolo placer.
Tu, brisa fresca que ondula mis cabellos,
besando mi tez morena.
Tu, noche callada, iluminada por millones de estrellas,
arrullando mi sueño.
Tu, corazón verde, motor de mi cuerpo,
energía de mi alma.
Así eres tu para mi, oasis-desierto
así soy yo para ti, desierto-oasis.
(Hacía tiempo que no destrozaba un poema, pero anoche soñé y he intentado plasmarlo asi).
Tú nunca destrozas nada, lo rellenas de bondad y alegría. Así eres tú y tus abrazos.

Felices vacaciones Ángeles.
