La celebración de un cumpleaños termina con tres familiares heridosLo que comenzó como fiesta de cumpleaños se convirtió en una batalla campal de la que resultaron heridos tres miembros de una misma familia en San Vicente de Alcántara.
Alrededor de las ocho y media de la tarde del miércoles ocurrieron los hechos. Cuando la disputa entre las hijas de las familias involucradas provocó que la madre y dueña del local en el que se estaba realizando la celebración, el Hotel Rural, interviniera enfrentándose a la hija de trece años de José Vega.
Una reacción esperada
"Yo, en principio, no quería que la joven fuera. De hecho, no es la primera vez que ocurre algo similar. Finalmente, accedimos a que la joven asistiera porque, como mi mujer es la cocinera, iba a estar presente en el cumpleaños y no pensamos que pudiera pasar algo. Fue casi al final cuando pasó todo. Sinceramente, le podía haber pasado a cualquiera porque a la dueña del hotel le da igual a quien tenga por delante", afirma José.
La madre de la joven, que trabajaba como cocinera del hotel desde hacía unos nueve meses, al escuchar los ruidos y los gritos del enfrentamiento acudió al lugar para poner fin a la disputa, sin embargo, cuando la mujer entró en la habitación fue increpada por la gerente, que también había agredido previamente a su hija.
Talla pequeña
"Mi mujer es una persona de talla pequeña y la dueña es una persona corpulenta, tal es así que la cogió en peso y la lanzó contra una pared causándole daños en las cervicales y otros que aún desconocemos", afirma Jose Vega.
Esperando en urgencias del Hospital Universitario Infanta Cristina a recibir algún tipo de noticia acerca de su mujer o de su hija, se encontraba Vega, "llevamos aquí toda la mañana haciéndoles pruebas. A mi hija le han roto el brazo y hoy se le ven los morados de los muerdos y golpes que recibió. Y a mi mujer todavía no le han dicho nada concreto, pero ella se queja de la espalda y del cuello" declara.
Según Vega, aún no han recibido ninguna información de la otra familia implicada. "No nos han llamado y tampoco hemos sabido nada de ellos. Pero vamos a poner una denuncia con parte de lesiones en cuanto salgamos del hospital" afirma.
A pesar de lo soprendente del caso, José comenta que "aunque el peor desenlance nos lo hemos llevado nosotros, no es extraño la actitud de la dueña del hotel. Mi cuñada, sin ir más lejos, estuvo trabajando con ella y lo dejó por los problemas que tenían constantemente. Como ella casi todo el mundo que comienza a trabajar en el hotel. Duran muy poco tiempo, una prueba de ello es que se puede escuchar todos los días en la radio que buscan gente para trabajar allí porque nadie aguanta la situación".
Un apósito en su cabeza cubre las heridas que le causaron los cristales de una puerta que se precipitó sobre él cuando intentaba entrar en la habitación en la que se estaba produciendo la pelea. "A mi prácticamente no me ha pasado nada, un par de puntos, quien me preocupa es mi mujer" comentaba afligido José.
Fiesta conocida
Nunca una fiesta de cumpleaños daría tanto que hablar al pueblo de San Vicente de Alcántara que ha visto cómo un acto alegre degradó en una pelea de tales dimensiones, que tres personas han tenido que ser asistidas por el servicio de urgencias del hospital Infanta Cristina por lesiones de diversa consideración y según José "con miedo ante la actitud que puedan tener con nosotros después del atercado".
