Van dos borrachos a las 4 de la madrugada por la calle y le dice uno al otro:
- ¿Apostamos a que la primera palabra que dirá mi mujer, cuando me vea, será "amorcito"?
- ¿Cómo puede ser? Son las tantas de la madrugada, mírate, estás borracho, sucio...
- No importa. ¿Apostamos un litro de güisqui, ein?
- Pero yo conozco a tu mujer, es una fiera.
- No importa. ¿Apostamos?
- Está bien, apostamos.
Llegan a la casa y tocan la puerta:
- ¿Quién es? -, pregunta la mujer detrás de la puerta.
- ¡Soy yo, mi amorcito!
- ¡¡¡¡¿Amorcito?!!!! ¡¡¡ Muereteeee jopu_taaaaaacabr_ooooonnnn !!!...
