Languidecen en centurias
las ávidas voces de las rocas
en su incesante silencio y grito
al trepidar las almas de las sombras
hechas ninfas cuando el sol apaga su fuego
bajo el aire de las ondeantes y abundantes aguas de mar de los recuerdos, donde todo es azul.
Viejos vientos que se posan sobre alcazares de olvidos
sobre cuencos habitados de ilusiones y pasiones,
el azul de tus besos reparte soledades
entibiadas por distancias inexistentes,
por los sentidos que viajan por cadenas
movidas por la sinapsis de todo el sistema,
que entrecruzan y hacen delirar a estos sentidos, ya sentidos, donde todo es azul.
Azul es la palabra no dicha,
sin embargo escuchada por mis pensamientos,
que se agrupan junto a los tuyos y se repiten en ti,
para que sepas que estoy en ti y contigo
caminando a tu lado por el azul del arcoiris de los tiempos y alianzas que nos unen desde aqui hasta el infinito.
