Abre los ojitos bien mi joven porque ahí te mando otra cosita... te amo, no lo dudes: tanto es así que las líneas me salen al momento... a ver si te gusta...
Abre bien los ojos mi nena linda,
y al leer esto sonrójate
al color de una guinda...
Te quiero.
Abre bien los ojos Maru,
al igual que siempre escribo para tí,
para la joven que abarca mi mente...
la joven que me hace latir.
Arrópame por la noche,
al amanecer te arroparé yo a tí:
haz que mi cuerpo derroche
el calor que emana de mí...
... despierta y abre los ojos ...
Al abrirlos me verás a mí
a tu lado como siempre
o rondando por ahí:
cerca tuyo y pendiente
de deseos por recibir.
Te siento al pensarte.
Abre los ojos y si notas que no estoy ahí,
invéntame...
piensa en los momentos pasados
y los que quedan por vivir.
Abre la boca suavemente
susurra mi nombre lentamente...
que al abrir los ojos pasaré
a estar aquí desde tu mente.
Siempre contigo... siempre juntos... Estoy deseando ser lo primero que veas cada mañana al despertar. Al abrir esos ojitos...