
Viene el hombre con los ojos coloradísimos. Lo acompaña su benemérita mujer.
El oculista los recibe. le pregunta: -¿ qué pasa que tiene los ojos tan colorados?.
-Bueno, es que yo andaba mal, y me hice unos lavajes de zanahoria en el ojo.
-¿¡ Por qué hizo eso?!.
-Y... dicen que es buena para la vista.
