Entra un hombre al jardín de su amigo y ve un letrero que pone "cuidado con el perro". Y de pronto ve a un perro chiquitín, chiquitín, entonces extrañado, va donde su colega y le dice:
- ¿Pero, para qué pones ese cartel si el perro es tan pequeño que no puede ni abrir la boca?
- Pues por eso, es que pero no sabes la cantidad de veces que me lo han pisado, juer.
