El perro o can es un canino carnívoro que pertenece a la familia Canidae, al igual que los lobos, zorros y coyotes. Generalmente, el término 'perros' es utilizado para referirse a la especie doméstica (Canis familiaris), la cual se cree que desciende de un ancestro similar al lobo. Algunos científicos sostienen, sin embargo, que el perro es una subespecie de lobo, Canis lupus familiaris.
El perro fue domesticado al menos hace 14 milenios y posiblemente desde hace 150 milenios según evidencias recientes. En este tiempo, la especie y/o el humano, ha desarrollado diferentes razas que pueden variar mucho en tamaño y color. Por ejemplo los perros chihuahueños que miden apenas unos decímetros y los grandes San Bernardo. Los colores de los perros varían de blanco a negro, con rojo, café o gris. Los perros, al igual que muchas otras especies, son muy sociables y viven y cazan en jaurías.
El promedio de vida varía en función de muchos parámetros como la raza, el tamaño del perro, la alimentación, el estres. Como norma general oscila entre los 12 y 15 años.
Es posible que en vez de que el hombre haya domesticado al perro, que los perros se hayan domesticado espontáneamente, escogiendo vivir cerca de los hombres para aprovecharse de los restos de su comida.
Los perros son muy valorados por su ayuda en la caza. Los perros enterrados en el cementerio mesolítico de Svaerdborg en Dinamarca muestran que en la antigua Europa, los perros eran una valiosa compañía.
Los perros siempre han acompañado al humano en su proceso a la civilización; su presencia está probada en todas las culturas del mundo, así en Perú en la etapa pre inca los mochicas, los usaron como ayuda de caza y también como mascotas en casa. En el entierro del Señor de Sipán, se encontró dentro de las tumbas restos de un perro, que seguramente lo usó en la caza, ya que el cráneo tenía perfectamente desarrollados sus molares; el cráneo de perro doméstico carece de ellos o los tiene atrofiados, por el tipo de alimentación que tiene en vida.
Los perros comúnmente son valorados por su inteligencia. La tradición popular sugiere que los perros tienen una inteligencia bastante desarrollada.
La inteligencia canina es la habilidad de un perro para aprender, para pensar y para resolver problemas. Los entrenadores de perros, los amos y los investigadores no se ponen de acuerdo en un método para probar la inteligencia canina como existe para los humanos.
Ciertas razas, como "Border Collies" y "Golden Retrievers", son por lo común más fáciles de entrenar respecto a otras como los perros de caza y de trineo. Aunque esta descripción no siempre es estricta y puede tener varias excepciones en el mundo. Aún el perro más introvertido, distraído y flojo puede más fácil obedecer al entrenamiento, que por ejemplo, un gato. La habilidad de obedecer y aprender sin embargo no es la única medida de la inteligencia.
Los perros por su naturaleza social entienden la estructura social y las obligaciones y a menudo aprenden rápidamente cómo comportarse con otros miembros del grupo, ya sean perros o humanos. Los perros adultos entrenan a sus cachorros mediante correcciones cuando no se comportan de la forma esperada (ladrando alto, dándoles de comer fuera de tiempo y cosas por el estilo) y los recompensan por comportamientos aceptables (jugando con ellos, alimentándolos, limpiándolos y cosas así).
Los perros también son animales que gustan de guaridas, así que pueden aprender fácilmente comportamientos relacionados a mantener su lugar limpio, relajándose en un área cerrada como es el caso de una jaula temporal para transporte, etc.
Algunas razas han sido continuamente seleccionadas a lo largo de cientos o miles de años por su capacidad de rápido aprendizaje, mientras que en otras razas, esta cualidad ha sido relegada en favor de otras características como son la habilidad de perseguir, cazar o de pelear con otros animales. Sin embargo, la capacidad de aprender obediencia básica -y eventualmente comportamientos complejos- es inherente en todos los perros. Los amos deben ser simplemente más pacientes con algunas razas que con otras.
Algunas personas creen que la habilidad de aprender rápido es un signo de inteligencia; otras creen que es un signo de servidumbre ciega y que la verdadera inteligencia de los perros está en razas tales como el huskie siberiano, que no está particularmente interesado en complacer a sus amos pero si está fascinado con las innumerables posibilidades de escapar a los campos o de atrapar y matar pequeños animales.
Por ejemplo, algunos dicen que los perros guías, de los que se espera que sean siempre obedientes, no son inteligentes porque no tienen oportunidad de reflexionar sobre nuevas cosas que hacer. Pero deben aprender un número enorme de comandos, entender como comportarse en una gran variedad de situaciones y reconocer riesgos o peligros a su compañero humano, alguno de los cuales ellos nunca han enfrentado.
Algunas pruebas de inteligencia tienen que ver con la habilidad de un perro de reconocer un vocabulario extenso; otras pruebas tienen que ver con el deseo o la habilidad de responder a diversas situaciones.
Debe señalarse también que en cuanto al comportamiento canino, muchas de las conductas indeseadas (llámese actos violentos o malas costumbres) son exclusivamente una muestra de un entrenamiento o educación irresponsable de parte de sus propios amos.
