ais alka qué bueno tu escrito!
En cuanto a lo humorístico de esta situación he de decirte que no lo es tanto...te recuerdo que si esa tortuguita está por algún rincón de tu casa fiambre...dentro de poco empezará a despedir un olor un tanto desagradable jejeje
A mí me pasó con un hamster...El pobre se escapó y no había quién lo encontrase, al cabo de los días mi armario empezó a apestar a cadáver, mi volita de pelo estaba podrida y con gusanos...Así que ale! a buscar a la tortuga y a rezar para que tu hija se la haya comido