Nunca he pagado. Nunca he cobrado (No le iba a cobrar a mi pareja ¡no?)
Creo que nunca pagaría, pero nunca se sabe a qué te puede enfrentar esta vida.
¿Cobrar? con este cuerpo, lo tendría difícil, pero siempre he pensado que el cuerpo no deja de ser mi parte animal y, sin ambargo, no dejo de cobrar por mi mente, aunque ofrezco, absolutamente gratis, mis sentimientos.
¡Quien esté libre de culpa....!
