Ayer por la noche procedimos al asesinato del mosquito que durante estos ultimos dias habia perturbado mis sueños.
Como no sabia de sus ultimas voluntades, no fue incinerado, si no que sutilmente fue depositado en el cubo de la basura.
No se si celebraremos honras fúnebres, o sera algo en la intimidad.
Mas que nada para que sus congéneres vean a lo que estoy dispuesto con el siguiente.
Jueves señores y señoras.
Y si... no sabemos nada de la chica de los lunares.
("Prefiero un lunar de tu espalda a la Pinacoteca Nacional". J.M. Serrat estoy seguro de que me lo perdonará, y estara de acuerdo conmigo....)
