La teoría dice que los tipos altos retraerán el consumo de empresas y particulares, esto debería presionar los precios a la baja y, por lo tanto, se contendría la inflación. Por cuanto parece que hay más miedo a la inflación que a que el descenso en el consumo atasque la economía, se "enfría" la misma manteniendo los tipos altos... Hay multitud de críticas a este punto de vista pero de momento parece la senda elegida por el BCE...
Efectivamente. Pero si nos detenemos más en la estrategia veremos una cosa curiosa. Si en un alarde simplificación vemos al conjunto de la economía como un todo formado por 2 partes: actividad privada y actividad pública, comprobaremos asombrados como de lo que se trata es de deprimir la actividad privada, sin tocar la pública, que por cierto, solo existe porque parasita a la privada. Y sobre este tipo de cosas hay infinitos estudios para justificar lo injustificable.