Que se aparte el viento para dejarme ver tu plenitud
que se aparte el otoño aciago que no deja ver tus formas de mujer
que el cielo se cierre en tormentas de fuego que iluminen tus jadeos más íntimos
que tú y yo no nos queremos ni falta que le hace al amor
que el amor fluya entre nuestros cuerpos sedientos de amor y paz
que suba el calor entre nuestras piernas y nos deje exhaustos
que nos debamos un hasta luego cuando el amor nos deje solos
que ni tú ni yo sepamos el nombre del otro hasta que se estremezca nuestro interior
que juguemos al amor y nuestro amor sea quien juegue con nosotros
que nadie nos vea felices para cebarse con nuestros defectos,
ni para aburrirnos con nuestras virtudes
que cuando me eches de menos sea porque tu mano recorre los caminos que supe hacer en tu cuerpo y disfrutes conmigo de nuevo
que cuando te eche de menos no recuerde ni como me llamo hasta que rememore tu nombre, tus ojos, tu cuerpo estremeciéndose entre mis brazos
que tu sexo y el mío sean uno siempre que tú y yo queramos no sea demasiado pedir
que nunca nuestros sentimientos sean menospreciados por ser a la vez deseos y sexo incontenible
que nuestros buenos deseos nos acompañen aunque el otoño se cierna sobre nuestras pequeñas lagunas saladas
que aunque no vuelen las aves sobre ellas vivan las efímeras violetas el resurgir de la primavera
que tu primavera sea también la mía y no dejes de recordármela siempre
que tus ganas de vivir y luchar por la vida resurja después de cada éxito o fracaso sin perder nunca la esperanza
que cuando te vea sepa que eres siempre la misma que me levanta el ánimo cuando lo tengo por los suelos
que mi último desengaño amoroso no solo te importe por como me levantaré mañana, sino que me ayudes a despertar ese nuevo día tan hermoso con tu amor y amistad incondicionales
que el enigma de quien será mañana el que caliente tus deseos más prohibidos, sea el acicate para llevar muy adentro los mejores sentimientos y los mejores recuerdos
que sea capaz de guardar el furor la pasión y las ganas de comerte siempre que caigas a mi paso aunque no sepa ni quien eres
que la amenaza de lluvia sepa a sal en tus labios y el trueno anunciador delate la tormenta que anida y resurge en tu interior
que así sea y así nos lo prometemos tu y yo que ni sabemos quienes somos ni como nos llamamos
así te lo desea siempre que me quieras como tú mejor y nunca tenido amor, y quizás, tú lejano amigo
te lo deseo siempre que te leo
un beso
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