EEUU libera a prisioneras iraquíes

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EEUU libera a prisioneras iraquíes
SAMEER N. YACOUB
Associated Press

BAGDAD - Los militares estadounidenses dejaron en libertad el jueves a cinco prisioneras iraquíes tal como habían exigido los secuestradores de una periodista estadounidense, aunque un funcionario dijo que la medida no estaba vinculada con el secuestro.

Las mujeres fueron dejadas en libertad y llevadas a la vivienda de un político suní en Bagdad, donde se reunieron con sus familiares, según un fotógrafo de la AP que presenció el encuentro. De ahí salieron en taxis.

La reportera independiente Jill Carroll está secuestrada desde el 7 de enero y los secuestradores exigen la libertad de todas las prisioneras iraquíes a cambio de perdonarle la vida.

"Cualquier anuncio podría no ser beneficioso para el caso debido a lo delicado (del tema), pero podemos decir, que si Dios quiere, ella (Carroll) será liberada", expresó a la AP el mayor general Hussein Ali Kamal, titular de inteligencia del ministerio del Interior iraquí. "La liberación de cinco mujeres iraquíes debería ayudar en la liberación de Carroll".

El ejército estadounidense había anunciado anteriormente que las mujeres iraquíes dejarían la cárcel entre el jueves y el viernes, como parte de un operativo de liberación a 419 iraquíes. Las autoridades tomaron la decisión después de determinar que no había motivos para mantenerlos presos, dijo el teniente coronel Guy Rudisill, portavoz del comando de detención estadounidense.

El ejército había confirmado que mantenía presas a nueve mujeres iraquíes. Se desconocía de inmediato lo que sucedió con las otras cuatro. El jueves los militares manifestaron que detuvieron a dos mujeres por presuntas actividades insurgentes en la ciudad de Mosul, en el norte del país.

Siham Faraj, madre de una de las liberadas, confirmó entre llantos que su hija, Hala Jalid, de 28 años, habría regresado a su casa el jueves después de ser arrestada con su hermano el 24 de septiembre, durante un allanamiento de las fuerzas estadounidenses en su vivienda de Bagdad.
"Mi hija está en casa ahora y en buen estado de salud, tras pasar cuatro meses detenida. Estoy muy feliz", declaró Faraj a la AP, en una entrevista telefónica.

Faraj pidió también a los secuestradores que liberen a Carroll, y dijo que la periodista es tan inocente como su hija.
Carroll, de 28 años, es una periodista independiente que colabora con el diario Christian Science Monitor.

En general, los detenidos son liberados después que se revisan sus casos, un proceso que puede llevar meses. Los funcionarios estadounidenses han expresado que estas liberaciones son parte de un procedimiento de rutina, y no están relacionadas con el caso de Carroll.