
Varias amigas estaban de vacaciones cuando vieron un hotel de 5 pisos que tenía un cartel que decía: “Prostíbulo para Mujeres”. Las chicas se excitaron y como no estaban con sus novios ni con sus padres decidieron entrar. El portero, un trolo diviiiiino, les explicó cómo era el funcionamiento:
“Mariposas, vayan subiendo piso por piso hasta el quinto. Donde encuentren lo que buscan, se quedan. Es muy fácil: hay carteles por todos lados.”
Las mujeres subieron al primer piso y delante de la puerta se encontraron con un aviso que decía:
Acá todos los hombres la tenemos cortita y finita
Las chicas se rieron y sin dedicarles ni un solo pensamiento a los infelices del primero, subieron al segundo piso. Delante de la puerta había un cartel que avisaba:
Acá todos los hombres la tenemos larga y finita
Todavía no parecía demasiado bueno, así que se dirigieron al tercer piso, a ver si daban con los modelos perfectos. Al llegar leyeron en el aviso:
Acá todos los hombres la tenemos cortita y gruesa
Esa era otra decepción, pero aún quedaban dos pisos por explorar, así que no se detuvieron y ascendieron al cuarto. Allí las aguardaba el cartel perfecto:
Acá todos los hombres la tenemos larga y gruesa
Todas las mujeres gritaron excitadas y estaban a punto de entrar cuando se dieron cuenta de que se iban a perder el quinto piso. Subieron raudamente esperando el paraíso y se encontraron con el consabido cartel, que decía:
Acá no hay hombres. Este piso fue construido solamente para demostrar que a las mujeres;
no hay poronga que les venga bien