LA TERNURA DE LAS PIEDRASSi hubiese imaginado, solo por un momento,
que tu tiempo y mi tiempo en este incierto mundo,
pudieran no ser más que un etéreo sueño,
habría hecho racimos de estos pobres besos,
que hoy duermen taciturnos en el reloj del tiempo.
Si hubiese imaginado, aquí, en mi sombra quieta,
que este camino, sin tí a mi lado, se me acabara,
hubiese lanzado al mar la barca de mi alma,
a la hora justa en que tu me haces falta,
en el lugar dónde te busca mi perdida mirada.
Si hubiese imaginado desde mi relativo mundo,
que ese lugar dónde permanecen ocultos,
los surcos de tus besos,
donde repican campanas de deseo,
tras los cristales que se pierden a lo lejos,
eterno remanso de tus ojos,
dónde saciar mi ansia, mi anhelo.
Si hubiese imaginado desde esta mi sequía,
que cubriría mi debilitado cuerpo,
de esta delirante melancolía,
que caminaría hacia tí sin saberlo,
cruzando horizontes en agonía de lamentos,
dónde los suspiros mueren en silencio.
Si yo hubiese sabido que sin tí,
no pudiendo y sin quererlo,
acabaría descubriendo
lo fácil que es vivir muriendo...

Quizás entonces, y solo entonces, y solo quizás, hubiese deseado verte arder en el infierno...
Paddy