Hace mucho que espero.
Tal vez desde aquel día
busqué (sin bien saber)
tu cuerpo verdadero.
Me extravié después
por senda que aún recuerdo.
Vasos, juventud, rosas...
Mas buscaba tu cuerpo.
Y pronto me dí cuenta
que era pobre el sendero.
Inmensa la belleza,
pero ángeles sin vuelo.
Te estoy aguardando ya,
bien consciente y muy cierto.
Noto en mí, viento estéril
donde el jardín primero.
Ven, yo sé bien cómo eres,
sé la flor de tu sexo;
pero además conozco
mi sed y tus secretos:
Lo que la mano habla
y los labios de fuego.
Y la Amistad profunda,
la pasión de irse viendo.
No me importa qué seas,
tu vida ayer o luego.
Sé que en tí será el mundo
como un día perfecto.
Ven, seco estoy de buscarte.
Sácame del invierno.
Tu rostro de dios joven
es luz en mi desierto.
Mira cómo te espero.
Venga pronto ese día
en que encuentre (y conozca)
TU CUERPO VERDADERO.

TE AMO BICHITO
