Una chica imponente va a subir al autobús, pero su falda estrecha se lo impide, así que se la sube hasta medio muslo, dejando entrever un liguero.
Un matrimonio que había en la parada, la señora que la ve, y le dice al marido:
- Paco, ¿no te parece indecente, lasciva y obscena la forma en que tienen los hombres de mirar a esa chica que va a subir al autobús?
Y dice Paco con los ojos desorbitaos:
- ¿Qué autobús, ein?
