Delirios...

DELIRIOS...

Háblame de cuando en cuando,
háblame si puede ser,
al alba, al anochecer,
en cualquier momento,
en cualquier lugar
que tenga libre tu pensamiento.

Háblame sin temor,
sin barreras, sin ofensas,
sin idiomas falsos, a través
del sendero, de la quimera
o de la luz del cielo.

Háblame corazón, en tono suave,
sencillo, sincero, cálido
y siempre amable.

Háblame si te queda tiempo,
si recuerdas, si piensas
aún en la sensibilidad
de aquellos dos cuerpos.

Háblame dócilmente,
entre la expresión del cuerpo
y lo que capta la mente.
Háblame si puedes,
si aún recuerdas la dicha
cargada de poemas,
háblame amorosamente,
probablemente recupere,
la ilusión de aquel sueño
y el deseo de la fuente.

“¿Dame una noche sobre el mar rizado,
titilando en la sombra los reflejos
de policromas luces a lo lejos,
sólo el rumor del agua y tú a mi lado.

La barca dormirá, sueltos los remos,
en el vaivén sereno de las olas,
y en total desnudez ambos, a solas,
aún logrando soñar, no dormiremos? (Hidalgo)”

...El poeta pedía una noche sobre el mar,
yo sólo te pido un beso
cuando esté dormido,
una palabra sin voz
cuando el rumor del mar
sea mí única guía,
y si puede ser, un abrazo
para seguir nadando
hacía el mar que ambos estamos esperando...

¡Háblame! Háblame,
de cuando en cuando,
si puedes al alba, sino,
cuando esté por las noches delirando...

Teo(tomcab58) Oct, 2009 ©