Ahora que en el mes de mayo se festeja
el “día de las madres” me he puesto a reflexionar
un poco y he llegado a la conclusión, de que poca
o ninguna justicia se le hace a aquellas mujeres que
han llegando a ser benditas madres.
En primer lugar, por lo menos en el mundo que yo vivo,
solamente el día 10 de mayo de cada año,
en todos lados se hacen festejos a la madre,
por parte de muchos hijos o hijas que durante el resto
de ese año se portan como si “no tuvieran ni madre”
y solo consideran a su madre como a una acémila
que lleva mucha carga...
En segundo lugar, la estructura social en este mundo occidental
tiene los conceptos de MADRE y AMA DE CASA
como sinónimos, y aunque le atribuyen a la mujer
deberes de madre, los confunden con deberes serviciales
y de atención personal para el resto de la familia.
Frases como “Madre, tráeme otra cerveza del refrigerador”
por parte del marido o macho de la prole...y
“mama, no tengo camisas limpias” por parte de un hijo
y “madre, sírveme el desayuno” de una hija,
ilustran claramente de que si no tuvieran una sirvienta en casa,
no tendrían “ni madre” en el hogar. La madre es la burra,
la acémila de carga que carga con todos los quehaceres
de un hogar.
De eso se ha aprovechado el consumismo mundial,
pero principalmente el norteamericano,
que ofrece en estas épocas ABSOLUTAMENTE TODO
como un regalo para la madre. Todo mundo se siente
“obligado” a hacer un regalos a su madre y no falta el hijo
que se compra un lab-top nuevecito, disfrazada de
“regalo de la madre” la cual a su vez la bendita madre
se lo presta a su hijo por el resto de su vida
sin saber ni como operar esa “madre". ..
No hablo yo de obsequios
como unas flores o un bello pensamiento,
no...yo hablo de muebles y alfombras, automóviles
y casas, refrigeradores y aspiradoras,
y sobre todo lavadoras y licuadoras y hornos y estufas
y diversos utensilios de cocina, para poder más fácil cocinar
.......que para mi no son otra cosa que
PONERLE A LA ACÉMILA UN MEJOR ARNÉS
PARA QUE LA CARGA NO SE LE HAGA TAN PESADA
Y SOBRE TODO PARA CARGARLE MÁS.
Ya que ahora puede lavar más ropa, puede guisar más sabroso,
puede limpiar más y mejor la casa, con la agilidad de convertirla
en un hogar, que nadie aprecia.
....y la agradecida madre tiene que estar feliz,
porque ese día la sacan a pasear,
la invitan a comer....perdonándole que ese día
no tiene que guisar.....y por encima
la madre abnegada siempre,
tiene que poner cara de felicidad,
por estrenar nuevas herramientas de trabajo,
o por tener una casa más grande que limpiar.
Y para colmo de males, salvo mejor opinión de otros,
el día del nacimiento de un hijo,
el máximo día de la maternidad,
se festeja al hijo o a la hija
y de la madre ni se acuerdan