Foro Oficial de PETERPAULXXX.COM

Bueno ante las muestras de OTRO, OTRO, OTRO, pues ahí vamos... a ver lo que sale de nuestras mentes oscuras y calenturientas...

me gustaría que esta vez LAS DAMAS FORERAS se animaran más... (que además sé que lo leen)  >:D

 el OBJETIVO pues igual que la vez anterior: que realicemos una historia contada por todos, y cada "autor/AUTORA" vaya dando libertad a su neurona calenturienta

LAS REGLAS también las mismas que la anterior pero creo conveniente suprimir el límite de palabras... no lo cumplíamos y la imaginación debe ser libre... así se evita que se corte el rollo

el resto sigue igual:

- una misma persona no debe realizar dos post seguidos (al menos debe dejar postear a otro en medio)

- el post debe tener continuidad, o al menos coherencia, con el post del forero anterior


Ahí vamos...

Sheila era una chica encantadora. Su personalidad  alegre era un imán para la personas deprimidas que buscaban apoyo y consuelo. Ella siempre estaba dispuesta a ayudar a otros; y ese era su punto débil, pues la gente tendía a abusar de ella.  Ya desde pequeña su madre tendía a descargar toda las cargas de trabajo sobre ella…  y la vida nunca le fue fácil.

Agobiada de no saber decir que no se había trasladado a otra ciudad donde había abierto un pequeño negocio. Su encanto personal (a la par que otros encantos que saltaban a la vista) hizo que el negocio produjera rápidamente ingresos. 
Había alquilado un pequeño piso en un edificio de vecinos no muy alto… El pisito era muy funcional y tenía una pequeña terraza donde podría disfrutar del sol.

Un día sonó el timbre y, al abrir, se vio de frente con un chico alto y guapo…
-   hola soy tu vecino. De enfrente… te querría pedir un favor… mi padre está muy mayor en silla de ruedas… te importaría cuidarlo un momento, sólo es cuestión de un momento.
 
Claro, Sheila no sabía decir que no.

-Pero es que tengo que trabajar- le dijo ella.
-No te llevara mas de 30 minutos. Tengo un asunto pendiente y no quiero dejarle solo. Mari Pili, la chica que le cuida esta al caer. ¡Por favor!
Pensó que no pasaría nada si abría la tienda media hora mas tarde. Su negocio de lencería de modelos exclusivos, tenia ya una clientela fija, que muchas de las veces, la llamaba por teléfono para concertar una cita, y tener mas tiempo para probar, esos encajes, esos tules, y esas gasas, en las cuales muchas de sus clientas se envolvían para deleite de sus parejas.
Sheila asintió y salio detrás del chico, al que ya conocía de haberlo visto algunas veces en el ascensor. Era educado y agradable, y mas o menos calculaba que debía tener la misma edad. Tenia un cuerpo fibroso, y un culo apetecible.

Entraron en la casa del padre de Aitor, así se llamaba el vecino. Este presento a su padre.
-Papa, esta chica tan guapa es Sheila, que te cuidara un momento mientras salgo un momento. Mari Pili no tardara en venir.
Su padre asintió, y Aitor le paso una tarjeta de visita con sus datos:
Aitor Tilla
Economista
669 669 669

Dicho esto, le dio a ella un beso en la mejilla y salio de casa...

(Vincent... tu turno, pero no te folles al padre.. todavia.   ;D )

pero que carrón, que terrible carrón :P :P

 Sheila despues de leer  y releer los datos en la tarjeta penso en la casualidad de tantas veces el No. 69  y no pudo evitar acordarse de lo atractivo que le parecia el chico .


Pero regreso al mundo real cuando el padre de Aitor le pidio lo ayudara a encender el televisor para mirar un rato las noticias.... La primera imagen ante sus ojos le robo los sentidos : una morena de fuego y una rubia de pechos generosos le aplicaban el sexo oral a un afortunado sujeto .Como la television casi no tenia sonido , la apago con rapidez , no supo  si el padre del chico se habia dado cuenta , pero lo que era mas que obvio era que alguno de los dos habia estado mirando pelis porno y se habia olvidado de apagar el reproductor del DVD.

Pensó que había sido una idiota por exaltarse de aquella manera... el sexo era algo natural, pero claro, para una chica de provincias que lleva poco en la gran ciudad habían cosas que la sobrepasaban todavía....

Miró al padre de Aitor y dudó seriamente que él hubiera estado disfrutando de aquella fogosa sesión de sexo en la pantalla... pobrecillo!!! se veía que aquel pobre hombre apenas sabía en qué mundo vivía!!!

Entonces sólo quedaba una opción!!  Había sido su vecino!! Mmmmmm, además de buenorro le iba el vicio, pensó Sheila con sonrisa pícara...

Sin saber por qué empezó a desabrocharse un poco la fina blusa de gasa que llevaba aquella tarde.... empezaba a tener calor en aquel piso, mucho calor.....

De pronto escucho una voz... aunque gastada, era profunda y no exenta de fuerza...

- Eres muy guapa.

Se ruborizó... pensó en abrochar de nuevo la blusa.

- Gracias, es usted muy amable... estooo (se sintió en obligación en repetir la presentación de su hijo ya que tenía la idea de que no se había enterado el anciano de nada) soy la vecina... me dijo su hijo que si la cuidaba un rato mientras venía su cuidadora.

- Ya sé quien eres, soy viejo pero ni soy tonto ni sordo... Gracias por venir a cuidarme (Sheila noto el sarcasmo de la pronunciación). Por qué apagaste la tele? te molestaba?

Sheila notó de nuevo el rubor en sus mejillas... - No... estoooo suponía que era cosa de su hijo y por educación lo retiré... (contestó)

- Va no te preocupes... los dos somos mayorcitos. En realidad es película que lleva siglos ahí... mi hijo no tiene tiempo para verla y yo ... a mí hace ya años que no me funcionan ninguna de las tres piernas. Por cierto te estás tirando a mi hijo?

Sheila tuvo un choque mental... por una parte la visión del anciano en silla de ruedas le causaba piedad, cariño... y por otra parte la impertinencia le dio ganas de marchar y dejar sólo al anciano... Sin saber el porqué (al fin al cabo Sheila era Sheila) fue venciendo la compasión... lo vio como un anciano desvalido con algo de demencia... o un canalla viejo simpático que la vida le había dado duro.

- No... no me lo tiro...

- pero te gusta... eh? ... es guapo... tiene éxito...

Sheila fue a sentarse al lado del anciano.  



(ronda de karmas a los que me deje)

La verdad es que el viejo tenía razón: era muy guapo.
Muchas veces se había descubierto mirando ese culo prieto dentro de los vaqueros... Ufff, a nadie le quedaban unos
vaqueros tan bien como sobre ese culo, esa barba mal afeitada a propósito, esa cara de niño malo... sin darse cuenta una
media sonrisa se dibujó en su cara.

- Menuda !! - dijo el anciano chasqueando la lengua- Sabía que te gustaba.... como a todas!!

Estaba a punto de replicar al anciano cuando escuchó las llaves en la cerradura de la puerta principal. Rezó porque fuera
su cuidadora y poder librarse de aquel maleducado lo antes posible.

Se levantó y su intención era ir hacia el recibidor para saludar a Mari Pili cuando ella se adelantó y entró en el salón; las piernas más largas y mejor contorneadas que hubiera visto hasta entonces, una larga melena y un escueto corsé atrapando su cuerpo
y regalando a la vista un generoso escote....

Santo cielo si Mari Pili es una put.a!!!! - pensó ella incómoda -

- Hola mi amor, ¿me has echado de menos? - le preguntó esa poco habitual cuidadora al anciano mientras se arrodillaba ante él
y le bajaba la bragueta....




ahora me voy que me han puesto deberes
 :P

Ya te la ha chupado la putita nueva?
Debe ser una buena chupadora, estas con pintas de mosquita muerta son las putas más desatadas

Sheila no podía creer lo que escuchaba, tomaba aire y no sabía si era para largarse a llorar y huir corriendo, o agarrarla de los pelos y revolcarla un rato por el piso a Mari Pili, que para ese momento no podía hablar porque tenía la boca ocupada... muy ocupada

No la asustes a la joven dijo el anciano, no seas mala, aparte no la conoces para hablar así de ella.
Mari Pili dejó por un instante de tragarse la poronga del abuelito, que por cierto no parecía una verga con capacidades disminuídas, muy por el contrario, a su pesar pensó Sheila
La miró, y mientras subía y bajaba suavemente su mano sobre aquel miembro, le preguntó: Vamos... se que te mueres por probarla. Mira que linda es, caliente, dura y jugosa, ven, no seas maricona. Como te vas a privar de este placer y privárselo a mi amor, que puede ser nuestro amor, si quieres

Por un momento Sheila dudó.
Su cabeza le decía una cosa y su corazón (o su clítoris hinchado) le decía otra.
Al final su lado masculino le gano la partida, y quedó pensando con lo de abajo.
Se quito la blusa, y dejo un precioso sujetador de encaje de La Perla.
Sus tetas, ni grandes ni pequeñas que le decía su follamigo Jorge, querían salir a toda prisa de aquella prisión de raso.
Unos pezones enhiestos la delataban, intentando colarse por las rendijas del encaje.
Mari Pili, le desabrocho la falda, y dejo a la vista un tanga, ya húmedo, a juego con el sujetador.
Sheila lo cierto es que tenia un buen cuerpo, o un buen polvo como decía Jorge. Un culo espectacular,a base de sus buenas sesiones de gimnasio, unas buenas tetas, unos labios rojos y carnosos, unos ojos hipnotizantes, unos cuantos lunares en la espalda (el mar de la tranquilidad le decía él) ; un cúmulo de lujuria, vamos.
Buena conversadora, con un fino sentido del humor, le habían granjeado un buen numero de admiradores, de los cuales algunos habían llegado lejos con ella...
Y ahora, y delante de sus ojos, el hermoso ciruelo de un joven sesenton, que pedía a gritos una mamada marca de la casa, junto con una mujer a la que no conocía de nada.
No sabia como iba a acabar aquello aunque por la pinta de como comenzaba, no estaba mal, pensaba, mientras que su boca ya estaba succionando la polla de su vecino mayor.
 -bye

Así en 4 patas, frente a la silla de ruedas, sentía como la polla del ancianito crecía en su boca, había probado muchas pollas, pero esta no paraba nunca de crecer, no sólo era larga sino que sentía que su boca se adormecía de tenerla tan abierta. En un momento notó que se su coño se humedecía mucho y se dio cuenta que tenía la lengua de la "enfermera" lamiendo su coño. Era una lengua muy habilidosa, pocas veces había sentido tanto placer. Había corrido su tanga y por momentos la violaba con su lengua. De pronto comenzó a estremecerse y tuvo un orgasmo tan violento que soltó la verga del viejo y pegó un grito terrible.
MariPili dijo entonces, sabía que eras una ****, mientras le jugaba con dos dedos en su coño y comenzó a lamerle el otro agujerito.
El dulce ancianito dijo: eso, preparale bien el culito, que quiero llenarlo de verga y tú no te detengas, sigue chupando así sabrás lo que es que te den bien por culo
Sheila temblaba, un poco por miedo de pensar en ese terrible instrumento en su hoyito, pero mucho más por el placer que sentía

Oyó la voz del "Papuchi"...

- Has logrado resucitar un muerto mejor que nadie... es un mérito que merece ser celebrado... creo que ha llegado el momento...

Sheila vio... como Maripili se levantaba y la ayudaba a levantarse a ella... con suma delicadeza tomaba al anciano en brazos y lo sentaba en el sofá... y la giraba a ella de forma que  le diese la espalda al viejo... ya todo preparado y sentado... quedando de frente a ella... la fue empujando hacía el... con suma delicadeza... hasta que tropezó con sus piernas... luego no tuvo más remedio que irse sentando sobre el anciano... y no tardo en notar como, aquella verga, le iba penetrando el único agujero virgen que le quedaba...

Sheila Sintió un pinchazo de dolor... pero fue breve... ella misma fue capaz de dirigir el ritmo de penetración que quería... agradeció sentir la lengua de Maripíli en su clítoris.. pues eso aceleró el cambio de dolor a un intenso placer... y lo mejor... Sheila, por primera vez en su vida, dejó de preocuparse por los otros, por que gozaran los otros (siempre le había pasado con sus parejas) para centrarse en gozar ella...

No llevaba la iniciativa... se había dejado llevar... sin embargo sintió que ella era la que dominaba... y eso, le permitía concentrarse sólo en ella... la experiencia le gustaba... y gozaba tanto que ni siquiera se lo planteaba...

Mientras el abuelo la enculaba, Mari Pili se arrodillo delante de ella y empezó a pasar su lengua por el incendiado clitoris de Sheila.
Se notaba que no era la primera vez que MariPi hacia esto; se la veía disfrutar tanto como a ella.
Con las manos jugueteaba con los pezones de Sheila, que estaban como cerezas maduras esperando ser mas que comidas disfrutadas.
Los pequeños jadeos de ella, demostraban que se lo estaba pasando muy bien.
Se había corrido ya por lo menos tres veces, sus piernas ya casi no le aguantaban, y cada espasmo la hacia vibrar como un a cuerda de violin.
Mientras tanto el abuelo incombustible seguía a lo suyo, dándole cera al pobre culo de Sheila.
Estaban tan ensimismados en lo suyo que no oyeron como la puerta de la casa se abría, y entraba el vecinito con su novia.

Karma para todos, menos para Jorge, que ya lo he karmeado esta mañana por su relato "Las peras de Elisa" editado en esta misma editorial.

Sheila se estaba sólo dejando pasar la puntita del nabo del padrecito... no hay que olvidar que ahí era virgen...

Pero cuando vio entrar a aquel chico con su novia... perdió el equilibrio, le resbaló un pie... y se metió toda la tranca hasta el fondo...

Se oyó un grito de dolor... al tiempo que un grito de placer, no exento de algún dolor, del anciano...

Papá que haces?...

Se fijó en la cara nerviosa del chico... pero también en la cara morbosa de la presunta novia.

Y... bajó la mirada tímidamente... notó como la profesional se acercaba a su oído y le decía...

- Corazón, me lo pasó también... y esto promete tanto, que creo que no voy a cobrar... pero si pasar toda la tarde si logras que el hijo me folle bien folladita.

Lo cierto es que Mari Pili conocía bien a la novia del mazas.
La conocía muy bien, muy bien. Habían sido compañeras de piso y también servido en el mismo cuerpo muchas veces.
Mari Juli, bajo la cabeza avergonzada. Con un guiño, Mari Pili, vino a decirle mas o menos que aquello quedaría bajo secreto de sumario, y que de su boca no iba a salir nada sobre su pasado.

Quedaba pues el pasmarote del mazas, que se quedo petrificado viendo como su padre le seguia reventando el ojete a Sheila, que no hacia mas que dar saltos sobre el atlético anciano.
Le duró el pantalón puesto al muchacho, lo poco que a Mari Pili bajarle la bragueta. Y ahi estaba... una hermosa tranca depilada en la base y con un capullo brillante que estaba diciendo cómeme.
Pero antes que Mari Pili pudiera comerse aquello se le adelanto Mari Juli, y le empezó a comer la boca al muchacho, mientras con una mano le iba sacando poco a poco aquello que tenia entre las piernas.

El abuelo, seguía a lo suyo, como si no fuera la cosa con él; bendito principio de alzheimer. Maravillosas pastillitas azules que se encargaba Mari Pili de comprarlas y dárselas.
La tetas de Sheila, preciosas con los pezones apuntando al cielo, no paraban de saltar. Por un momento parecia que los lunares de su espalda (  ::) ) fueran a salir de alli disparados.
Aquello empezaba a parecer una orgía familiar.
No, no... aquello no parecía.... era un orgia familiar.

 -bye