Título: Miedocres... Publicado por: Sirius en 22 de Mayo 2007, 11:09:45 Están por todas partes. No es que vivan entre nosotros. Es que sonambulean por nuestra vida muertos de sueños. Disimulan sus líneas de impresión, se tiñen las ganas de gris y se especializan en ninguneo, pero si te fijas bien, por ahí andan. Da igual que ejerzan como banqueros, agentes de seguros, inspectores de hacienda, auditores, consultores, jefecillos, empleados o jornaleros. Los reconocerás enseguida por su hedor a moqueta, naftalina y cubículo de PVC. Son inconfundiblemente confundibles.
Para sobremorir necesitan poca luz y menos cuidados, regarlos a fin de mes con un sueldo abonado en trienios y, sobre todo, jamás dejarlos cerca de tener que tomar una decisión. Porque ellos hace tiempo que tomaron la suya. Todo acabó cuando decidieron no decidir. Todo se fue al garete el día que dijeron “vale”. Y desde entonces, la vida les hace una mueca rictus mortis muy parecida a una sonrisa. Para ellos, ser feliz es aprender a conformarse. Y si no estás de acuerdo, pues también les parecerá bien. Graduarse a los 22, prejubilarse a los 55, y por medio, pagar una coma dos hipotecas, preñarse un par coma tres de veces, y soñar sólo las noches que duermen mal. Pocas contradicciones, sólo alguna que otra alergia a la inestabilidad, fobia a la incertidumbre y una vida marital plagada de afectos secundarios. Lo mejor que les puede pasar es que un día cualquiera (porque estas cosas siempre ocurren un día cualquiera) les aparezca un AK-47 en la mano, una menor en el disco bien duro, un bultito en la piel o una maceta en la cabeza, y entonces, bueno, como que todo cobre un poco de emoción. Para ellos y para los demás, porque siempre encontraremos al típico vecino que hará lo que sea por salir en el informativo de sobremesa de turno diciendo que “era un vecino de lo más normal, jamás lo habríamos imaginado”, o algo muy similar. También los hay más discretos, los que no se conforman con morirse una vez y prefieren morirse un poquito cada día, esos cualesquiera que despiertan el día menos pensado, ese en el que ya todo suele ser demasiado tarde y se hacen las preguntas previas al fin de todas las cosas. ¿Qué coño he hecho en mi vida? ¿Quién me ha robado el mes de abril? ¿Por qué no lo cubre el seguro? Que vivan los miedocres. Que mueran todos también. Pilar básico que sustenta por cojones el prestado del bienestar. Los que pagarán tus pensiones, tus viajes en bus a las afueras de tu ciudad, la gold card para todos los museos que jamás quisiste visitar, tu silla de ruedas con motor electromecánico y tu psicólogo geriátrico en prácticas. Por eso, si alguna vez te cruzas con uno de ellos, dale las gracias. Por eso, y por creerse que lo malo es cambiar, lo necesario es un billete de vuelta, lo peligroso es intentarlo, lo importante es tener para poder ser, o que lo crucial es renunciar a luchar contra sus propios miedos, que para eso están las grandes corporaciones, para que nos den luchados, troceados y metidos en bolsitas aptas para el microondas. Dale las gracias e inmediatamente después hazte un favor: pilla a la primera persona que veas y échale un polvo. Igual no te ayuda para nada, pero mira, este artículo tampoco, y no veas lo bien que me lo he pasado escribiéndolo. Risto Mejide Diario ADN Ya sé que os doy mucho la vara pero es que sus artículos me enganchan -bye Título: Re: Miedocres... Publicado por: sogtulakk en 22 de Mayo 2007, 11:42:21 -juasjuas
bien. . .bien. . . y cual es la antitesis a la miedocridad? el pexito? ::) Título: Re: Miedocres... Publicado por: Canela en 22 de Mayo 2007, 12:06:48 El aprendiz de brujo,
de tanto repetir sus viejos trucos, empezó a creer que realmente podía hacer MAGIA. . . . . . Entonces subió al edificio más alto de su ciudad y SALTÓ. . . . . . . . El golpe fue brutal pero no murió en el acto. . . . . . Vivió el tiempo suficiente para comprender que había sucedido un milagro. . . . . . . Durante unos segundos fue inmortal. |