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Un Tour concentrado...Le Tour Ultime

Un aficionado vizcaíno se prepara para pedalear noche y día con el objetivo de completar en diez días el recorrido de la ronda francesa

Imagínense recorrer a lomos de una bicicleta el Tour de Francia. 22 días, 4.000 kilómetros, puertos imposibles en los Alpes y Pirineos, ritmos despiadados. El frío, el calor y el viento complican el reto. Muchos abandonan. Y ahora pónganlo más difícil: reduzcan de veinte a diez las jornadas para completar el recorrido. Supriman los dos días de descanso. Olvídense de parar a dormir en un hotel. Piensen en pedalear noche y día. Eso es Le Tour Ultime, la prueba de ciclismo extremo más prestigiosa de Europa. A partir del 1 de septiembre, un vecino de Miraballes, Julián Sanz, va a intentar completarla. Será el primer participante español.

Sanz lleva todo el año preparando la cita. Llegará con 30.000 kilómetros en las piernas. Todos los días se levanta a las 4 de la mañana, se pone el 'maillot' y se sube a la bicicleta. Los primeros meses del año, sobre el rodillo. Desde mayo, en la carretera. A las nueve, para: hay que ir a trabajar. A las seis de la tarde, vuelve a entrenar hasta las 9.

Su novia, Agurtzane, no lo ve claro. «Está loco», afirma. «Primero eran las IronMan (3.800 metros a nado, 180 kilómetros en bicicleta y 42 a pie), pero esto ya lo supera. Pero, ¿qué voy a hacer yo si es su afición?». Sus padres también tenían sus dudas al principio. «Pero al final logré arrastrarles con la idea. Y ahora, incluso, vendrán en una autocaravana a ayudarme. Mi madre me hará la comida», dice.

Sanz saldrá el 1 de septiembre a las 14 horas para completar 4.070 kilómetros antes del día 10 a esa misma hora. Deberá ganar la partida al reloj. Para ello, se pasará las primeras 24 horas sin parar un solo segundo. Al día siguiente sí se dará un respiro: dormirá una hora. «He pasado semanas durmiendo dos horas al día. Y sólo necesito cinco minutos para quedarme dormido», dice. El secreto radica «en la calidad del sueño». La obsesión de Sanz por el tiempo no queda ahí: «Me lavaré los dientes y me afeitaré sobre la bici. Sólo pararé para dormir».

El entrenamiento nocturno le ha servido para aprender a vencer al sueño. «Me lo tomo como un puerto. Hay que soportarlo. El secreto, bajar el ritmo y pegar acelerones. Así subes las pulsaciones, te excitas. Y si hace falta, acelero a grito pelado», cuenta Sanz.

Todos los corredores de Le Tour Ultime -por ahora, nueve- se someterán a cinco controles antidopaje durante la prueba. Sanz recalca que siempre existe una alternativa al dopaje: «la fuerza de voluntad». Durante la carrera no tomará ni un café. «Los estimulantes te ayudan un periodo de tiempo muy corto. Luego, tras el subidón, el bajón es mayor», explica.

PUES ASI HA QUEDADO LA  COSA

pos. Rider Finish time

1 Jure Robic 8 days, 16 hours and 51 minutes
2 Thomas Ratschob 10 days and 2 hours
3 Julian Sanz Garcia 11 days and 24 minutes

 O0.......... O0

Su novia, Agurtzane, no lo ve claro. «Está loco»....   -bailarin pero olé sus bemoles si lo consigue....  -oeoeoe

 :o :o

éste no es de bilbao bilbao porque no le ha dado la gana... al igual que los otros ocho


 -alabar


P.D. y que conste que ha quedado tercero porque un día, como pasaba cerca se acercó a san mamés a ver jugar al athletic

Ahí va la ostia,no será de Getxo no ???

Los del norte teneis un par de OO -alabar -beer

Cerca lo que se dice cerca no estaba, pero bueno, le dijeron que estaban calentando los jugadores y se hizo 800 kilómetros en un momento, y llegó al decanso del partido... :P


Hablando en serio, ésto es para Super Hombres, qué barbaridad, y qué mérito!!! :o

Comparado con estos, lo de Armstrong e Induraín es moco de pavo. Ole sus webs  -aplaudir